Existen cientos de libros, portales de internet y talleres sobre planes de negocio, y no pretendo agregar más modelos e instrucciones de las que ya han sido escritas.
Al contrario, creo firmemente que menos es más Un buen plan de negocio es como una mesa de tres patas. Sencillamente, si falla una pata, se cae la mesa.
En mi opinion, muchos manuales de planes de negocio dejan de recalcar la esencia – las tres patas — de un buen plan de negocio: la audiencia, el modelo de negocios, y los clientes.
Un buen plan es ante todo una tarjeta de presentación y un documento de venta. Por lo tanto, es fundamental saber exactamente a quién está dirigido.
Por ejemplo, un inversionista espera ver un cierto formato, mientras que un banco requiere otro tipo de contenido. Por otra parte, un plan para uso interno tiene ciertas características muy diferentes a las de un plan de negocio de inmigración. Mientras mejor conozcas a tu audiencia, mayores serán tus probabildades de éxito.
En segundo lugar, los nuevos planes de negocio deben demostrar que el concepto o propuesta funciona. Existen herramientas muy efectivas para conceptualizar el modelo tal como el lienzo de modelos de negocio, que ayuda a comprender los principales aspectos del modelo de negocio y sobre todo, cómo se relacionan.
Tercero, los nuevos planes de negocio deben definir detalladamente cómo la empresa encontrará clientes y qué acciones concretas son necesarias para crecer. La idea de fondo es simple: las empresas no fracasan por falta de productos o servicios, sino por falta de clientes!
Para culminar, el verdadero beneficio de un plan de negocio radica en hacernos las preguntas importantes y explorar posibles soluciones y escenarios.
Como dice la cita del Dr. Graeme Edwards, lo importante no es el plan – lo que cuenta es la planificación.