por Peluche Bello-Pardo
Miami, FL. Febrero 5, 2014.- ¡Siii! Llegó mi semana de cumpleaños. Y digo, mi semana porque como a mi me adoptaron, mis Papás no tienen la certeza de si nací el 4 o el 10 de Febrero. Así que tomaron la decisión salomónica de celebrarme toda la semana y pegar mi fiesta con el Día del Amor y la Amistad y con el aniversario de mi llegada a la casa (que es el 24).
Pero antes de todas las celebraciones, quiero contarles que voy a tener un amigo nuevo, porque los papás de los Nuñecitos (los hijos de unos amigos muy queridos de mi familia), adoptaron un Beagle Bebé al que llamaron Riley.
Por lo que me ha mostrado mi Mami en fotos, Riley está muy feliz con sus hermanos mayores, quienes lo conocieron cuando los fue a buscar un día a la salida del colegio. Su Papá dice que los tres van a seguir desordenando el mundo y su Mamá lo saca a pasear con mucho gusto. Me hace feliz cuando alguien adopta una mascota. Riley, que seas muy feliz con tu nueva familia. Y espero que nos lleven pronto a jugar en el Trails & Tails Park de Doral.
Mi Mami siempre me hace mi tortita de cumpleaños, porque como soy alérgico a todo lo que tenga plumas, no me puede comprar casi nada en las tiendas de mascotas. Este año, me dijo que me va a hacer mini-muffins de mantequilla de maní (porque como la Veterinaria me mandó a rebajar, no puedo comer mucho postre). Para estos muffins, mi Mami usa dos cucharadas de aceite de coco, un cuarto taza de compota de manzana (que hace ella misma, sin azúcar, por supuesto), tres cucharadas de melaza, tres cucharadas de mmm mantequilla de mmmm maní (yes!), una cucharada de semillas de chía licuadas en dos cucharadas de agua (en sustitución de los huevos), una taza de harina de trigo integral, una cucharadita de polvo de hornear, un cambur y un poquito de canela.
Primero, pone a precalentar el horno a 350ºF. Luego, en el bowl azul, mezcla el aceite, la compota y la melaza con la batidora. Entonces le agrega la mantequilla de maní y lo mezcla bien. Y después le pone las semillas de chía ya licuadas en agua (que quedan como una gelatina) hasta que se combina. Aparte en el bowl blanco, mezcla la harina, el polvo de hornear y la canela. Y les va poniendo cucharadas de la otra mezcla hasta que todo queda junto. Pero aún falta el cambur. Lo maja con un tenedor en un platico y lo mezcla bien con lo que tiene en el bowl blanco.
Luego agarra el PAM y lo rocía en los moldecitos de los muffins. Y aquí es cuando pone la mezcla en los capacillos con corazoncitos tan bonitos que compró. Los mete en el horno por diez minutos, luego les clava unos palillos y les hace huequitos por donde sale humito caliente y los saca del horno para ponerlos a enfriar.
Lo que hace Mami es que me va dando uno por día. Deja cinco en la nevera y guarda los otros, envueltos cada uno en papel de aluminio, en el congelador (para que me queden blanditos cuando me los caliente). Uyyy! Ya no puedo esperar a que estén listos mis muffins de cumpleaños. En mi próxima columna les prometo foto y todo.
Peluche Bello-Pardo
Por cierto, ahora que viene el Día del Amor y la Amistad, quiero comentarles que nosotros los perritos no debemos comer chocolate bajo ninguna circunstancia porque nos intoxicamos. Mi Papá le preguntó a la Vet por qué pasa eso y le dijo que nosotros no podemos metabolizar la cafeína y otros componentes del chocolate como la teobromina, por eso nos dan temblores, vómitos y diarrea. En los casos más severos nos pueden dar convulsiones, caer en estado de coma y hasta fallecer.
Así que ya sabes, ten mucho cuidado de que no se te caigan pedacitos de chocolate al suelo y en no dejar los bombones por allí pagando, porque a pesar de la prohibición, a muchos nos puede gustar el olor del chocolate y podemos comerlo accidentalmente.
Si vuelven los días de frío, no nos dejes afuera por mucho tiempo. Y por favor, no nos pongas suéteres apretados y mucho menos zapatillas, porque nos cuesta caminar y nos sentimos mal vistos. A mi una vez me compraron unas zapatillas de cuero (parecían Converse y todo) y en lo que pude, boté una de ellas por la ventana del carro en plena Calle 8. Mi Mami casi se pone a llorar, paró el carro y mi Papi se bajó a buscarla. Aunque por mala suerte la consiguió, creo que entendieron el mensaje y no me las pusieron más, Gracias a Dios. Porque ¿Quién ha visto perro con zapatillas?.
Ahora los dejo porque sonó el timbre. ¡Yuppi! Es mi primo Alan. ¿Se acordará que viene mi cumple? Ojalá lea esto pronto en su clase de Español para que celebre conmigo y mis hermanas. Eso sí, mis muffins son míos. A ellos mi Mami les preparará la Torta de Cheesecake vegan… Feliz Día del Amor y la Amistad. Gracias por querernos y cuidarnos.